CATALANES, VASCOS. DESDE SEVILLA

Antes de nada os comentaré que soy de Sevilla y soy seguidor del Real Madrid, así que esto no lo escribe ningún catalán o Vasco. Ni un cule.

Tres días después me sigo sorprendiendo de la repercusión que tienen unos simples silbidos o pitos a unas notas musicales. No se me escapa el significado de esas notas, de patria, de pertenencia, de país....

Lo que si parece que se les escapa a quienes crítican los pitos es su motivación.

En los días de incontables casos de corrupción, en los días en los que el yerno del rey nos roba a manos llenas, en los días de los desahucios, ¿nos extraña que ciudadanos no se sientan representados?

Cabe preguntarse, antes de criticar los pitos, a quien  representa este himno. Aún sin entrar en discusiones históricas de cómo y quien instauró esta bandera y esta familia real, resulta fácilmente entendible que ciudadanos libres, expresen libremente su repulsa.

Me pregunto también, como español, que daño me causaron esos pitos, y la verdad es que ninguno. Sin embargo la intención de este gobierno de multar, sancionar y menoscabar la libre expresión si me causa daño.

Y mas daño, como español y como persona, me causan la corrupción, los abusos y el dinero robado por una familia real que yo no elegí.

Me pregunto también si para ser seguidor del Barcelona o el Athletic debe una persona callar cuando suena el himno que no comparte.

Yo soy del Real Madrid, y para serlo no tengo que estar de acuerdo con este himno o con este rey.

También soy español como el que más, y por eso quiero un país donde pueda expresar, con simples pitos, mi rechazo a lo que considere oportuno. Ese es el tipo de España que quiero. Y si encima fuera una España donde elegir si quiero rey o no, sin corrupción ni desahucios, ya sería genial.

Amigos vascos y catalanes, yo, siendo de Sevilla y sintiéndome español, comparto vuestros pitos. Y como español me gustaría ofreceros un país del que sentirse orgulloso.

A dia de hoy no existe ese país. No sólo no os representa a vosotros, a mi tampoco.

Por eso espero que algún día dejéis de pitar, pero no porque os multen, sino porque escuchéis un himno que os represente.

Y a los patriotas que claman daño a la bandera mientras se llevan su dinero a Suiza les dedico otra sonora pitada.

España no es su himno ni su bandera. Es su gente. Y no podéis decir que queréis que los catalanes y vascos sean españoles mientras no os preocupen más ellos.

El gobierno y los patriotas harían bien en dejar de multar y empezar a entender. Antes que pedirle que dejen de pitar deberían preguntarles porque lo hacen. Quizás así aprendan algo.

Mientras no queráis escuchar a catalanes y vascos, o a andaluces y gallegos, ni ese es mi himno.

Ni esta mi bandera.